El ente público Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) ha expresado hoy su "total" respeto a todo tipo de autos y resoluciones judiciales y ha agregado que está dando "toda la colaboración que se precise para que se conozca toda la verdad" sobre el accidente.

Fuentes del Adif han explicado a Efe que permanecen a la espera, después de que el fiscal Antonio Roma haya pedido que se retiren las imputaciones a los responsables de este ente público en relación con la tragedia ferroviaria ocurrida en Santiago el pasado 24 de julio que costó la vida a 79 personas.

En un auto dirigido al juez instructor del caso, Luis Aláez, y difundido hoy por la propia Fiscalía, Antonio Roma vuelve a apuntar a la excesiva velocidad del tren Alvia 151, que cubría el trayecto Madrid-Ferrol, como principal causa del accidente.

Por ello, pide que se dejen sin efecto las imputaciones de los responsable del Adif: Fernando Rebón Sartal, Manuel Besteiro Galindo, José Antonio García Díez, Carlos Ayuso González y Roberto Sáez Alonso, que ya han declarado ante el juez.

El decano de los abogados de Ourense, Arturo González, personado en la causa, ha indicado a Efe que también permanece a la espera de que se le notifique por escrito la petición del fiscal, ante la que ha planteado, como una de las opciones, que se exija al Adif que comunique los nombres de las personas a prestar declaración y se practique la misma.

Por su parte, Javier González, abogado de la asociación de víctimas Apafas, personada en el proceso, también espera esta notificación que le parece un "disloque, por decir algo suave".

"Estamos en fase de instrucción, de averiguación de hechos, y en esa fase de instrucción -ha expuesto- creo que el fiscal lo menos que debería de hacer es tratar de investigar realmente hasta sus últimas consecuencias y sus últimos extremos el acaecimiento de hechos y qué es lo que ha ocurrido".

Aparte de la "negligencia y distracción" del conductor, ha continuado Javier González, hay "más cuestiones que inciden en el accidente", como la relativa a la seguridad en la circulación que "tiene y tenía en esa fecha más que trascendentes lagunas".

En su opinión, "no hay que ser un mago de predicciones" para concluir que después de 33 kilómetros de tramo prácticamente recto entre 38 viaductos y 31 túneles en un total de 83 kilómetros, ha precisado, además del factor humano "hubiese convenido poner ahí alguna otra medida adicional de seguridad", como "cualquier señal distinta a la que había" de vía libre.

"Creemos que la señalización era inadecuada, incompleta, ineficaz y tenía que haber tenido otras medidas de seguridad", ha aseverado.