ANV ha optado por responder a los intentos de desalojarles de las alcaldías que ocupa generando más presión en la caldera vasca y atizando la tensión en la sociedad vasca. Frente a los esfuerzos capitaneados por PSE y PNV, la izquierda aberzale les ha advertido de que piensa plantarse ante estos "ataques" y llama a sus simpatizantes a concentrarse ante cada ayuntamiento que debata una moción en su contra.

El primer escenario será, hoy mismo, Mondragón (Guipúzcoa), donde se debatirá una moción presentada por socialistas y nacionalistas en la que se reclama la dimisión de los cargos que no condenen la violencia de ETA, en especial de la alcaldesa, Inocencia Galparsoro.

Además de carteles y buzoneos en los pueblos donde gobierna ANV para movilizar a sus militantes, la alcaldesa de Hernani (Guipúzcoa), Miren Beitialarrangoitia, llamó a los ciudadanos a "dar su opinión" en los plenos previstos. Tendrán muchas ocasiones, ya que en las próximas semanas los ayuntamientos vascos y navarros debatirán las mociones éticas en las que se pedirá, inútilmente, que los cargos aberzales dimitan, para convocar, después, otras sesiones en las que se intentará sustituir a los ediles radicales.

PROPUESTA ALTERNATIVA Además, ANV planteará en todos los municipios una moción alternativa en la que defenderá que las mociones de censura o las peticiones de dimisión "no contribuyen a la solución del conflicto".

Mientras, el Partido Comunista de las Tierras Vascas (EHAK) salió ayer del mutismo en el que ha permanecido desde que se inició el trámite para su ilegalización y comenzó a poner en valor la fuerza de sus votos en la Cámara vasca ante la consulta que planteará el lendakari. Así, su portavoz, Nekane Erauskin, advirtió de que solo apoyará la propuesta si con ella se pretende "solucionar el conflicto" y no solo reforzar la vía estatutaria.