El dirigente de la ilegalizada Batasuna Joseba Alvarez dijo hoy que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha decidido dar una "patada al proceso", lo que supone, a su juicio, una "situación especialmente grave". Álvarez, acompañado por la dirigente de su formación Marije Fullaondo, ofreció una rueda de prensa en San Sebastián en la que se refirió a la decisión que adoptará próximamente el Tribunal Supremo (TS) sobre la ilegalización del partido ASB.
Joseba Álvarez dijo que todavía se desconoce "cuál será" la decisión judicial relacionada con Abertzale Sozialisten Batasuna, aunque comentó que la "intención política del Gobierno no va precisamente en la dirección" de que el TS "legalice definitivamente a la izquierda abertzale", ya que parece más bien "todo lo contrario". Independientemente de esta resolución, Álvarez reiteró su compromiso con la "resolución del conflicto" a pesar de que los "acontecimientos" ocurridos en las últimas semanas evidencian, a su juicio, que el Ejecutivo "dice no al proceso".
"El Gobierno está en una situación de decir no a unas elecciones democráticas y al avance en la resolución del conflicto y eso sólo lo puede mantener con el apoyo inestimable del PNV", añadió. Insistió en que únicamente se podrán solucionar los "problemas" a través del diálogo, la negociación y la existencia de una "situación de igualdad en el ámbito político".
El ejemplo de Irlanda del Norte
Álvarez se refirió además al caso irlandés, dijo que la "izquierda abertzale está dispuesta a hacer el camino del Sinn Fein" y se preguntó si Rodríguez Zapatero estaría dispuesto a hacer el de Tony Blair. Comentó que en el caso de Irlanda ha existido un "respeto por las diferentes partes", se han producido "conversaciones públicas y privadas", se han dado diferentes "pasos" relacionados, por ejemplo, con la excarcelación de presos y se han alcanzado acuerdos políticos.
"El PSOE y el PNV saben que algún día el proceso aquí también tendrá que pasar por fases como las de Irlanda", recalcó Álvarez, quien insistió en que todo ello "sólo será posible si la otra parte", es decir "el Gobierno y el PNV", entran definitivamente en una "vía" como la impulsada en Irlanda.
