Bildu y Aralar-NaBai han reclamado hoy que se aplique "inmediatamente" el fallo del Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo que anuló la 'doctrina Parot' y han exigido que se ponga fin a la vulneración de derechos que, en su opinión, sufre el colectivo de presos etarras.

Las portavoces parlamentarias de estas formaciones se han pronunciado en este sentido al término de la Mesa y Junta de Portavoces del Parlamento de Navarra en la víspera de que el Tribunal Supremo celebre una reunión plenaria para fijar su posición respecto a la citada doctrina.

La portavoz de Bildu, Bakartxo Ruiz, ha opinado que, "a pesar de que el viernes ocho presos salieron a la calle", parece que "se está intentando alargar el procedimiento".

Es por esto por lo que ha reclamado "que la sentencia se aplique inmediatamente, no puede ser que se sigan vulnerando los derechos de los presos a los que se ha aplicado esta doctrina", ha aseverado al respecto.

Ha añadido que ésta "no es la única vulneración de derechos que sufre el colectivo de presos" y en este contexto ha denunciado "la situación límite a la que están abocados en la cárcel de Sevilla que hace que muchos presos lleven casi quince días en huelga de hambre".

En un sentido similar, se ha pronunciado Asun Fernández de Garaialde (Aralar-NaBai), quien ha demandado que "no se alargue más en el tiempo la vulneración de los derechos humanos para las personas presas, que se deje de conculcar estos derechos humanos".

Igualmente, ha sostenido que son más los derechos que se conculcan y ha citado como ejemplo el mantenimiento de la dispersión y la permanencia en las cárceles de presos enfermos.

Tras remarcar las "durísimas condiciones que les están imponiendo y que han llevando a una huelga de hambre en Sevilla", donde ha dicho que hay dos presos navarros, ha exigido el "cese definitivo de la conculcación de derechos humanos y el acercamiento de presos, teniendo en cuenta que la cárcel de Iruñea está infrautilizada".

En aplicación de la sentencia del Tribunal de Estrasburgo, han sido puestos en libertad tres presos navarros, Inés del Río, que fue la primera y cuyo caso fue origen de la demanda interpuesta ante los jueces europeos, Jokin Mirena Sancho y José Ignacio Urdiain.