La gestora que dirige el PSOE desde la dimisión de Pedro Sánchez ha propuesto hoy que el Comité Federal que deberá decidir si cambia el no a Rajoy por la abstención acabe a las 13.30, lo que ha provocado el malestar de los "sanchistas", que creen que eso supone "limitar" la libertad de las intervenciones.

"La gestora quiere limitar el turno de palabras hoy, que todo acabe el mediodía, total ya hablan en los medios", ha protestado en su Twitter el vasco Mikel Durán.

Según fuentes socialistas, la gestora ha propuesto acabar el debate a las 13.30 horas, lo que supondría que este duraría unas tres horas, ya que el comité ha quedado constituido sobre las 10.30 horas.

José Blanco

El eurodiputado del PSOE y exministro José Blanco preside la mesa del comité federal junto a Mariola López y Carmen Madrid.

Blanco sustituiría en la presidencia de la mesa a la secretaria general del PSOE de Sevilla, Verónica Pérez, que ha desempeñado este cargo en los dos últimos años.

La propuesta de la gestora responde al deseo de renovar a los tres vocales que integran el órgano que dirige y organiza los debates del comité federal con el fin de reequilibrar el reparto de fuerzas tras la dimisión de Pedro Sánchez.

Además de Pérez, persona de máxima confianza de la presidenta andaluza, Susana Díaz, la Mesa ha estado integrada por el vasco Rodolfo Ares, como vicepresidente, y la alcaldesa de L'Hospitalet de Llobregat (Barcelona), Núria Marín, como secretaria, ambos afines a Sánchez.

Con la renovación de la Mesa, la nueva dirección pretende que los 'sanchistas' pasen a estar en minoría con un solo vocal.

La previsible elección de Blanco como presidente, así como la de los otros dos componentes, es el primer punto del orden del día del comité federal, en el que se va a decidir si facilitar o no la investidura de Mariano Rajoy.

El exvicesecretario general del PSOE se ha mostrado partidario en las últimas semanas de la abstención para desbloquear la formación de gobierno.

Esta postura le ha hecho recobrar protagonismo político, después de que tras su salida del Gobierno en 2011, fuera elegido eurodiputado en mayo de 2014, lo que le dejó relegado a un segundo plano en el partido.