El ministro de Fomento y portavoz del Gobierno, José Blanco, ha zanjado hoy la polémica sobre la posibilidad de adelantar aún más las elecciones generales, previstas para el 20 de noviembre, al exclamar: "Por favor, somos un país serio".

En declaraciones a Punto Radio recogidas por Efe, Blanco ha descartado así la propuesta del Partido Popular de adelantar los comicios, petición a la que también se han sumado otras formaciones nacionalistas, como CIU, a raíz de las turbulencias financieras de los últimos días.

"Hay una fecha y un calendario electoral, y lo que hay que hacer es respetarlo", ha reiterado el ministro, antes de recordar que quien tiene la potestad de determinar la fecha electoral es el presidente del Gobierno y ya lo ha hecho.

Blanco ha considerado una "frivolidad" que la "única propuesta" que, en su opinión, ha hecho el partido que lidera Mariano Rajoy, cuando había un problema de verdad en Europa que amenazaba seriamente la economía de España, sea pedir que se adelanten aún más las elecciones.

"Muy poca confianza tiene en sí mismo, en su liderazgo y en sus propuestas", ha ironizado Blanco, antes de aconsejar a los populares que tengan "un poco de tranquilidad" ante la proximidad electoral, "no vaya a ser que se les note demasiado que su único objetivo es llegar al Gobierno a cualquier precio, y eso al final sea juzgado convenientemente por los ciudadanos".