Los dirigentes del PP que acudieron al foro del partido preguntaban a sus vecinos de asiento o pasillo quiénes eran los invitados a la boda del secretario general de la FAES, Jaime García-Legaz, con una periodista, que tuvo lugar ayer en Madrid. ¿Irá Aznar? Por supuesto, es su jefe. ¿Y Rajoy? Claro, es el líder del partido en el que milita y trabaja como diputado el novio. ¿Y Aguirre? También. Tienen buenas relaciones. En resumen: todos pensaban con morbo en el banquete, con tan ilustres invitados y un tema tan sabroso --el del espionaje-- sobre la mesa.

En los corrillos del foro también se habló en internet. No en vano, el PP organizó ayer la primera quedada de un partido con sus amigos de la red. Aparecieron virtualmente más de 150 personas, a las que Rajoy agradeció el esfuerzo.