La ministra de Defensa, Carme Chacón, reconoce que el ataque repelido ayer en Sabzak, en el que murieron 13 insurgentes, "es uno de los más graves" sufridos por el contingente español en sus siete años de misión en Afganistán, y ha subrayado que para España "es fundamental" evitar bajas civiles.

Chacón, en declaraciones a Antena 3, anuncia que Defensa estudia si las condiciones de seguridad postelectorales en Afganistán requieren aumentar los efectivos del contingente permanente que España mantiene desplegado en el país asiático, y señala que, si es así, lo solicitará al Parlamento.

Además, avanza que se encuentra a la espera de que la OTAN concrete la operación desarrollada hoy en la provincia de Kunduz, al norte de Afganistán, donde al menos 90 personas, de ellos la mitad civiles, han muerto en un bombardeo de las tropas internacionales.

La ministra de Defensa hace hincapié en que las 41 naciones que tienen militares en Afganistán son "muy conscientes de que es fundamental" evitar "a toda costa" las bajas civiles para que la misión internacional tenga éxito. "Cada baja civil aumenta el número de agentes de la insurgencia, y España ha insistido una y otra vez en ello", subraya y asevera que así lo demuestra la actuación de los militares españoles en el incidente ocurrido ayer en el paso de Sabzak.

Así, explica que fueron los propios soldados españoles los que, a pesar de haber solicitado previamente apoyo aéreo a la ISAF, cuando llegaron los helicópteros "Mangusta" decidieron que no actuaran "porque se podía poner en riesgo bajas civiles", y continuaron su operación por tierra.

Sin embargo, recalca que los militares contestaron a este ataque -producido en la misma zona donde el miércoles resultó herido un militar español- con "contundencia, como nuestras reglas de enfrentamiento permiten" y confirma que se trataba de "una banda perfectamente organizada".

Chacón agrega que en el incidente de ayer no hubo seis horas de continuo combate, sino que la necesidad de garantizar el entorno de seguridad alargó la actuación de las tropas españolas.

Según la ministra, los insurgentes asaltaban el paso de Sabzak para extorsionar a los convoyes que intentaban atravesarlo.

No obstante, insiste que "da lo mismo si son delincuentes comunes de la insurgencia, o bandas organizadas, o elementos organizados talibanes", porque "todos ellos tienen armas y todos ellos atacan". "Somos muy conscientes, y lo son nuestras tropas, de que estamos trabajando en alerta máxima, de que esta es la misión más dura, más compleja y más arriesgada que España está llevando a cabo".