La sombra de la corrupción planea de nuevo sobre la gestión del PP en el Gobierno de Baleares. La policía detuvo ayer en Palma de Mallorca al que fue director gerente de la empresa pública Bitel, entre los años 2003 y 2007 --periodo en el que el PP gobernó las islas con mayoría absoluta--, Damià Vidal, y a otras tres personas por un presunto delito de malversación de caudales públicos, por una cuantía que podría alcanzar los 700.000 euros. El arresto de Vidal, de 49 años, es fruto de la investigación que realiza la fiscalía anticorrupción por una denuncia del actual consejo de administración de Bitel, sociedad dependiente de la Consejería de Economía del Gobierno insular.

El delito de malversación de caudales públicos que se les imputa a los detenidos incluye el uso ilícito de una tarjeta de crédito de la que disponía Vidal, con la que se habrían realizado pagos de "importantes cantidades de fondos públicos sin justificar", según informó la policía.

CONTRATOS A DEDO La fiscalía anticorrupción investiga también la adjudicación de contratos a dedo por trabajos no efectuados o por los que se han presentado como justificación "burdas copias de otros". La investigación ha comprobado también la existencia de dos préstamos procedentes de los fondos de Bitel, por importe de 27.000 euros y 9.000 euros, y la autocompra de un vehículo adquirido por el que fuera gerente de la empresa pública y comprado de forma particular por él mismo.

Vidal accedió a esta compañía como cargo de confianza designado por el entonces presidente del Ejecutivo autonómico, el popular Jaume Matas.