Aunque el porcentaje mayoritario sigue siendo el de quienes no califican la situación política española de buena ni de mala, aumenta el número de los que la definen como mala o muy mala (el 31%), frente a quienes la consideran buena o muy buena (el 21,75%). Las valoraciones más positivas están entre los encuestados de 45 a 59 años y los que se consideran de izquierdas. En Euskadi (el 49,1%) y en Cataluña (el 41,1%) se supera la media de quienes dicen que la situación ha mejorado.