Los cortes de carreteras, sabotajes de vías y bloqueos de medios de transporte en Cataluña le están saliendo muy caros al erario público. El impacto económico de las movilizaciones contra la sentencia del procés en las infraestructuras y los servicios de transporte del Ministerio de Fomento se eleva ya a 7,3 millones de euros, mientras que 175.000 viajeros se han visto afectados por retrasos o cancelaciones. Así lo recoge un primer informe elaborado por este departamento al que ha tenido acceso este diario.

Una de las facturas más altas es la de los daños del aeropuerto de El Prat. Los desperfectos causados por los actos vandálicos de la protesta organizada por Tsunami Democràtic el mismo día que se dio a conocer la sentencia alcanzan los 1,2 millones. Varias instalaciones de los aparcamientos quedaron destrozadas durante los altercados con los cuerpos policiales, donde los manifestantes utilizaron incluso los extintores para enfrentarse a los antidisturbios. Los daños causados en infraestructuras ferroviarias como el sabatoje que tuvo lugar el viernes en una línea de tren ascienden a 600.000 euros, mientras que los desperfectos en las autopistas y carreteras de titularidad estatal por los cortes y las barricadas suman 360.000. En La Junquera, los manifestantes que interrumpieron la entrada a España en la AP-7 llegaron a cortar las vallas protectoras para ponerlas de barrera frente a los vehículos.

La factura por las indemnizaciones a las que tendrá que hacer frente Renfe en cumplimento de sus compromisos de servicio y puntualidad no se queda atrás. La compañía pública ha calculado que no bajarán de los 1,2 millones de euros. Los pasajeros afectados tienen tres meses de plazo para reclamarlas.

LUCRO CESANTE / El importe más alto es el que corresponde al lucro cesante, el de los ingresos que no se han llegado a producir por parte de las empresas del grupo Fomento. Según los datos de Renfe, Adif, Aena, Enaire y Puertos, la caída en el número de pasajeros previstos ha causado un impacto de cuatro millones de euros en sus cuentas.

Los incidentes de Barcelona han disuadido a muchos potenciales clientes de viajar a la ciudad en estas fechas, además del miedo a quedar atrapados en algunos de los cortes y sabotajes. Fomento estima que, hasta el momento, se han visto afectados más de 190.000 viajeros.