Gaspar Llamazares insistió ayer en interrogar a José María Aznar en la comisión de investigación parlamentaria del 11-M. Para ello animó al PSOE a superar "su temor reverencial" al expresidente y pidió al PP que abandone su silencio negativo.

El secretario general del Grupo Socialista, Diego López Garrido, contestó que si los demás grupos apoyan la propuesta, el PSOE también lo hará, pero después de contrastar las conclusiones de unos y otros, y de ver si se necesitan más comparecencias.

El líder de IU, que ayer repartió a los medios de comunicación sus conclusiones sobre el 11-M y sus recomendaciones policiales, jurídicas y políticas en la línea de ampliar el pacto antiterrorista o de establecer un acuerdo contra el terrorismo internacional, afirmó que la investigación "quedaría coja" sin "la última palabra" de Aznar.

En su opinión, es necesario que el expresidente aclare "por qué en vez de convocar el pacto antiterrorista y el gabinete de crisis optó por la acción partidista y se fue alejando de la información policial para acercarse peligrosamente a la mentira de Estado".

VINCULOS CON LAMARI Mientras, el imán argelino Abdelkrim Beghdali y el sirio Safwan Sabagh, detenidos el pasado viernes en Valencia por los atentados del 11-M, confesaron ayer ante el juez Juan del Olmo que tuvieron relación con el presunto miembro de la célula terrorista Allekema Lamari, que podría ser el séptimo terrorista no identificado que se inmoló en Leganés.

El juez liberó a Beghdali, pero prorrogó la detención de Sabagh, quien admitió que le había dado sus números de teléfono a Lamari.