"Seguiré trabajando porque la instrucción continúa", ha sido la reacción del juez José Castro este miércoles a la salida del juzgado, cuando se le ha preguntado su parecer sobre el auto de la Audiencia Provincial de Palma que ha suspendido "de momento" la imputación de la infanta Cristina. "Sigo pensando lo que dije en la resolución recurrida", ha comentado el magistrado sobre la posición que mantendrá en la recta final de la causa.Castro ha asegurado que no dará nuevos pasos hasta recibir oficialmente el auto de la Audiencia de Palma que ha tumbado provisionalmente su imputación de la hija del Rey y que le ha encomendado nuevas tareas: profundizar en la investigación fiscal a la infanta y poner fecha límite a la entrega de correos a el exsocio de Iñaki Urdangarin, Diego Torres. El auto llegará esta misma semana, aunque el juez ya se ha puesto manos a la obra. Esta mañana se ha reunido en su despacho con un representante de la Abogacía del Estado, instancia que representa los intetereses de Hacienda en la cuita y que se opuso a la imputación de la infanta.

Ahora, el fisco tendrá que ampliar sus informes y aclarar "dudas e incertidumbres" al magistrado, ya que así lo ha determinado la Audiencia Provincial de Palma, que ve "zonas oscuras" en los informes librados por la Agencia Tributaria sobre la posible comisión de un delito fiscal y blanqueo de capitales en el comportamiento de la infanta. Estas presuntas irregularidades se habrían cometido a través de Aizoon, la empresa que comparte con su marido. Entre otras cosas, no entiende la Audiencia por qué no se fija la cuota presuntamente defraudada en el informe o se carga la responsabilidad exclusivamente en Urdangarin, cuando parte del dinero de origen público ingresado por Aizoon fue presuntamente a sufragar gastos privados, como la reforma del domicilio familiar de Pedralbes.

También ha desfilado por el despacho del juez un letrado del despacho Riutort-Contestí, que trabaja desde Palma con el bufete de Roca-Silva, que lleva la defensa de la infanta. Nadie ha querido hacer comentarios a la salida, a la espera de las nuevas resoluciones que dictará Castro en los próximos días. Entre otras, la que debe poner fecha límite a Torres para la entrega de correos, si está en su ánimo hacerlo.