El juez José Flors, que investiga la trama de corrupción vinculada al PP en su vertiente valenciana, admitió ayer la personación en el caso Gürtel de los cuatro diputados socialistas del Parlamento autonó- mico que la semana pasada presentaron una querella contra el presidente de la Generalitat valenciana, Francisco Camps. Los socialistas ven así cumplido su deseo de acceder a la causa en la que están imputados por un supuesto delito de cohecho el líder popular y tres altos cargos del Gobierno valenciano.
"Consideramos que se ha utilizado dinero público para hacer contrataciones públicas, precedidas por una serie de regalos que se han hecho a personajes muy destacados de la Administración valenciana", declaró ayer Angel Luna, el portavoz socialista en las Cortes valencianas.
La decisión del magistrado del Tribunal Superior de Justicia de la comunidad permite al PSPV conocer las diligencias de un proceso que pretende esclarecer si Camps y el resto de los imputados recibieron dádivas en forma de trajes a cambio de adjudicar contratos a la Generalitat.
En el marco de estas pesquisas, el juez tomó ayer declaración a dos empleados de Milano y uno de Forever Young, tiendas donde la trama adquirió los trajes que supuestamente regaló a Camps y los otros imputados.
