El guarda forestal y ganadero Santiago Mainar se ha retractado de las declaraciones que hizo ante la Guardia Civil, en las que se confesó como el único responsable del asesinato del alcalde de Fago (Huesca), Miguel Grima, y ha asegurado ahora que no es el autor del crimen.

Así lo indicaron a EFE fuentes de la investigación, las cuales, sin embargo, no precisaron el alcance de la modificación de la declaración hecha por Mainar, el pasado domingo, ante el juzgado de Jaca que investiga el caso, ni si habría admitido algún grado de implicación en los hechos.

En sus primeras declaraciones ante la Guardia Civil, Mainar, que ingresó en la cárcel de Zuera (Zaragoza) como presunto autor de un delito de asesinato, confesó ser el único autor del crimen pero no detalló a los agentes de la Unidad Central Operativa (UCO) el lugar donde escondió la escopeta de postas con la que se realizó el disparo que acabó con la vida de Grima.

La detención de Mainar y su posterior ingreso en la cárcel se basó no sólo en la confesión "prolija y coherente" que realizó ante los investigadores sino en los restos de ADN (tejido epitelial) hallados en el volante y freno de mano del vehículo del alcalde, que apareció a unos 15 kilómetros del lugar donde fue hallado el cadáver.

Las fuentes explicaron que los investigadores consideran, a tenor de las pruebas practicadas, que el detenido no actuó solo y que la escopeta empleada en el crimen podría no ser de su propiedad, sino de otra persona.

Señalaron a este respecto que el hecho de que en los distintos registros practicados en las propiedades de Mainar no apareciera la escopeta, y la poca verosimilitud del testimonio del detenido al afirmar que arrojó el arma al interior de un camión de matrícula francesa apuntan a la posible participación de otras personas.

El testimonio de un residente de Fago que aseguró haber pasado con su coche por el punto de la carretera local donde se produjo el crimen y que manifestó haber visto a una persona con una linterna en su casco que le daba paso y a otra en el interior del vehículo del alcalde, es otro de los indicios con los que cuenta la investigación para no aceptar tan solo la hipótesis de un asesino solitario.

A juicio de las fuentes referidas, aunque Mainar rechazó ante la juez titular del Juzgado de Instrucción nº 2 de Jaca ser el autor material del asesinato, los indicios que apuntan a su presunta participación en los hechos justifican la decisión adoptada por la instructora al decretar su ingreso en prisión.

El letrado de la acusación particular, Enrique Trebollé, considera que la orden de ingreso en prisión de Mainar pone de manifiesto que los investigadores de la Guardia Civil disponen de pruebas incriminatorias "suficientes" contra el sospechoso.

Trebollé, que representa a la compañera sentimental de Grima y a dos de sus hermanas, dijo a EFE que en el supuesto cambio de sentido en las declaraciones de Mainar respondería a una estrategia de la defensa.

El letrado, que todavía no ha tenido acceso al sumario al estar bajo secreto, añadió que la familia de Grima se encuentra destrozada y que confía "en la labor de los investigadores".

Por su parte, el abogado de Mainar, Javier Notivoli, reiteró a Efe que el caso permanece bajo secreto de sumario y rechazo precisar datos en torno al contenido de las declaraciones de su cliente, pero destacó que el principio de presunción de inocencia prevalece en todo proceso penal.

"Cualquier ciudadano sometido a juicio en España -subrayó- tiene derecho a la presunción de inocencia, y se le debe considerar inocente mientras no exista un juicio y una condena, y Santiago Mainar no es una excepción".