La ministra de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Ana Mato, ha negado este miércoles en la sesión de control al Gobierno en el Congreso de los Diputados que el Ejecutivo vaya a recortar más en gasto social.
Mato realizó esta afirmación al contestar una pregunta formulada por la diputada del PSOE y ex ministra de Sanidad, Trinidad Jiménez, que formuló al ministro de Hacienda sobre la reducción de gasto en porcentaje del PIB en políticas sociales, pero que, finalmente, contestó Mato porque así lo decidió el Ejecutivo. "No está previsto rebajar el gasto social ya que las políticas sociales son una prioridad de este Gobierno", manifestó Mato.
Sin embargo, Jiménez afirmó que en el programa que el Gobierno ha enviado a Bruselas "se dice que se reducirá más de un 15% el gasto sanitario" y que también habrá recortes en educación y dependencia.
La ministra de Sanidad espetó a la socialista que "podrán decir lo que quieran, pero el porcentaje de gasto social se se ha incrementado", para después referirse a la gestión de las comunidades, que son las que tienen transferidas las competencias en educación, sanidad y dependencia y puso como ejemplo los recortes que ha llevado a cabo en Andalucía, gobernada por el PSOE.
"Errores" en la cobertura a inmigrantes
Mato ha admitido "errores" en la cobertura sanitaria a inmigrantes sin papeles, aunque los desvinculó de la muerte de un joven senegalés en Palma de Mallorca, que carecía de tarjeta sanitaria y falleció por tuberculosis en su casa.
Mato ha asegurado que "a ninguna persona se le ha negado asistencia sanitaria". "Absolutamente a ninguna -ha agregado-. Otra cosa distinta es que se quieran utilizar cuestiones tan trágicas para estrategias partidistas. Estamos acostumbrados porque ustedes suelen hacerlo". "Si una norma en vigor impidiera la atención sanitaria urgente para unas personas, inmediatamente procederíamos a su derogación, pero éste no es el caso. Ninguna persona ha dejado de ser atendida cuando lo ha necesitado", ha insistido la ministra.
La titular de Sanidad ha dicho que, según los informes que le han remitido las comunidades autónomas, los pacientes han sido atendidos con "la máxima diligencia en primaria, en urgencias". "Se les han realizado las pruebas diagnosticas -ha continuado- y se han activado los protocolos de salud pública. En ningún caso se ha producido una discriminación en función del origen o condición de la persona atendida."
Pero, "desgraciadamente", ha advertido Mato, "a veces, se producen errores, pero eso no tiene que ver con la asistencia sanitaria".
