"Estoy arruinado. Necesito hacerme rico. Necesito mucho dinero para vivir". Esto lo dijo Zaplana por teléfono en 1990. Pedía a su amigo del PP, Salvador Palop, dinero de unas comisiones a empresarios para comprarse un Opel Vectra. El diálogo se grabó por un pinchazo policial y se incluyó en el sumario del caso Naseiro sobre la financiación ilegal del PP. El Supremo anuló las pruebas de las cintas y Zaplana pudo ser candidato a la alcaldía de Benidorm. Las perdió, pero el voto de una tránsfuga socialista le aupó al cargo.