La manifestación del sábado en Pamplona, en la que participó la plana mayor de Batasuna, ha enfurecido al PP y ha hecho que la temperatura de las relaciones entre este partido y el Gobierno, ya de por sí alta, aumente. El secretario general de los populares en Euskadi, Carmelo Barrio, acusó ayer al Ejecutivo de llevar a cabo "una orgía de cesiones a ETA" y ser "casi un aliado de la estrategia" de la banda. "El Gobierno de Zapatero está permitiendo que ETA y Batasuna tomen las calles", declaró Barrio. "Esto es tan escandaloso como que en Fráncfort salga una concentración del partido nazi".

Los populares también se dejaron oír desde Madrid. Su secretario de libertades públicas, seguridad y justicia, Ignacio Astarloa, calificó la marcha de "escandalosa" y opinó que fue "una burla masiva de los señores del terror al Estado de derecho". Acusó al Gobierno de no perseguir a ETA con suficiente intensidad. "Es tremendo que en casi un año no se haya producido ninguna detención de ningún miembro de ETA", dijo Astarloa, quien exigió que el Ejecutivo explique al Parlamento "la suma de elementos" que indican que el Gobierno "está haciendo dejación en la aplicación de la ley".