En sus críticas a la política exterior de los socialistas, Rajoy exigió ayer el cese de Máximo Cajal, representante del Gobierno en la Alianza de Civilizaciones. El diplomático defendió la legitimidad de Irán para continuar con el enriquecimiento de uranio. Rajoy pidió que Zapatero le destituya inmediatamente y aseguró que, si no es así, "habrá que pensar que apoya la tesis de que Irán tenga la bomba atómica".