El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha comunicado a sus más directos colaboradores su intención de potenciar lo antes posible el papel del rey Juan Carlos, especialmente a nivel internacional, por lo que el jefe del Ejecutivo sólo participará en actos conjuntos con el jefe del Estado cuando sea realmente imprescindible, según aseguraron ayer fuentes del Gobierno socialista.

Zapatero ya tenía decidido, antes de la victoria del 14 de marzo, que si alcanzaba la Presidencia fortalecería las instituciones, fundamentalmente las Cortes Generales (Congreso y Senado) y la Jefatura del Estado, mermadas, a su juicio, en la etapa de Gobierno de José María Aznar.

Ya en su primera conversación con el rey Juan Carlos con motivo de su triunfo en las legislativas, Zapatero le expresó su lealtad a lo que representa una monarquía constitucional, y le aseguró que existiría una estupenda relación en el funcionamiento institucional.

La potenciación del papel del monarca será evidente, según las fuentes consultadas, en política exterior y relaciones internacionales, y es que Zapatero considera que Juan Carlos es, y se lo ha dicho personalmente, "el mejor embajador de España".