José Blanco, secretario de organización del PSOE, acusó ayer a José María Aznar de filtrar documentos secretos sobre el 11-M. El expresidente había declarado la víspera a la emisora colombiana Radio Caracol que tenía en su poder "todos los informes" del CNI. Blanco, después de recordar que esos papeles pertenecen a la seguridad del Estado, declaró: "Ahora ya sabemos quién ha filtrado los papeles, y cada papel que salga ya sabemos quién será el responsable".

Esta semana el diario El Mundo publicó una nota secreta del CNI en la que daba cuenta de conversaciones telefónicas de Josep Lluís Carod Rovira (ERC) con Arnaldo Otegi (Batasuna), y de éste con el lendakari Juan José Ibarretxe y con Rafa Larreina (EA), durante la jornada de reflexión.

El secretario general del PP, Mariano Rajoy, declaró que desconocía si Aznar "tiene o no tiene" esos documentos. "Yo, desde luego, no los tengo", precisó.

LA MATIZACION Fuentes "próximas" a José María Aznar citadas por Europa Press puntualizaron ayer la interpretación a sus declaraciones a Radio Caracol, al decir que "hasta el día 13 al mediodía no hubo constancia expresa y cierta de que había una pista islámica sólida" de la autoría del atentado del 11-M. Esas fuentes negaron que con esas palabras pusiera en evidencia a su ministro del Interior, Angel Acebes, y al portavoz de su Gobierno, Eduardo Zaplana.

Acebes, a las 14.30 horas de aquel día, jornada de reflexión electoral, sostenía: "Que sea Al Qaeda no me lo ha dicho ningún responsable" policial. Y Zaplana, entonces ministro portavoz del Gobierno, había dicho una hora antes: "Algunos parece que quieran descartar que pueda ser la banda criminal y asesina ETA".

Las fuentes citadas por la agencia dijeron que Aznar se había remitido al testimonio de los mandos policiales que, ante la comisión de investigación del Congreso, declararon que la pista islámica estuvo clara al mediodía del 13-M. Las fuentes negaron que Aznar hubiera contradicho a Acebes.

En realidad, el entonces secretario de Estado de Seguridad, Ignacio Astarloa, fue alertado la noche del día 12, por el comisario general de información, Jesús de la Morena, de que se iba a detener a dos españoles de origen indio, que habían vendido las tarjetas telefónicas utilizadas en las bombas. Hacía horas que los indicios no apuntaban a ETA.

Rajoy avaló ayer la matización de Aznar. Dijo que opinaba "lo mismo" que el expresidente.