El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy; el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, y la titular de Sanidad, Ana Mato, han desdeñado este miércoles las peticiones del PSOE para que renuncien a sus cargos. La sesión de control al Gobierno se ha convertido en una sucesión de reproches mutuos por la forma de abordar los casos de corrupción y por las consecuencias de los mismos, y Rajoy ha aprovechado para anunciar que, como nueva medida, los partidos estarán sometidos a la ley de transparencia.

"Le pido que renuncie, que lo deje, que dimita", ha planteado el secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, en su pregunta a Rajoy al entender que el presidente está lastrado por el caso del extesorero del PP Luis Bárcenas. Según el presidente, el líder socialista se ve abocado a representar este "papelón" por los problemas existentes en el PSOE y no está legitimado para pedir su dimisión mientras no actúe con la misma transparencia con la que él lo ha hecho.

Petición por la amnistía fiscal

La petición de dimisión de Montoro la ha hecho la portavoz socialista, Soraya Rodríguez, por su gestión de una amnistía fiscal que, más que regularizar, considera que ha permitido "blanquear" y en la que se han "colado" personas como Bárcenas. El ministro ha aprovechado para anunciar que solo uno de los 21 imputados en el 'caso Gürtel' ha presentado una declaración para acogerse a la amnistía fiscal y por un importe inferior a 3.500 euros. El ministro ha acusado a los socialistas de "irse al monte" y de estar condicionados por sus problemas internos, y les ha retado a plantear una moción de censura.

Una "infamia"

También la ministra de Sanidad, Ana Mato, ha reiterado este miércoles que no va a dimitir por una "infamia", pese a la insistencia del PSOE, que ha aprovechado la sesión de control al Gobierno en el Congreso para pedirle, hasta en tres ocasiones, que deje el ministerio.

El primero en solicitar su cese ha sido el diputado Eduardo Madina, quien ha considerado que Mato no está en condiciones de seguir al frente del departamento después de que su nombre haya aparecido "vinculado" al 'caso Gürtel', "la trama de corrupción organizada más importante de la democracia". "Esta infamia no me va a doblegar porque no tengo nada que ocultar, voy a seguir trabajando al servicio de los españoles y muy orgullosa de pertenecer a este Gobierno", ha afirmado tajante Mato, quien ha recalcado que cuenta con la confianza del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy.

"La conducta de otra persona"

La ministra ha justificado su postura al afirmar que cuenta con "la gran fortaleza" de saber que no ha cometido "ningún acto, en ningún momento, ni antes ni ahora, que no se corresponda con la ética que es exigible a todos los responsables políticos". Mato ha lamentado también que quieran hacerla "responsable de la conducta de otra persona", en referencia a su exmarido, Jesús Sepúlveda, exalcalde de Pozuelo de Alarcón (Madrid), quien estaba citado este miércoles para declarar ante el juez, pero se ha acogido al derecho a no hacerlo.

La diputada socialista Carmen Montón ha puesto en duda la legitimidad de Mato para seguir al frente del ministerio, "cuando en todos los rincones del país se está hablando de sus regalos y fiestas vinculadas a la trama corrupta". La ministra ha denunciado ser objeto de una "cacería política y personal" a la que se ha apuntado, ha dicho, el PSOE. "Una cacería que llega hasta lo grotesco cuando se me atribuye como celebración familiar el ascenso a primera división de un equipo de fútbol, el Getafe", ha añadido.

Una "rémora" para la sociedad y el partido

También la socialista Esperanza Esteve se ha subido al carro para pedir la dimisión de Mato, al considerar que "se ha convertido en una rémora para la sociedad y para su propio partido". "Le ruego que dimita, hágase un favor y hágalo, de paso, a todos los españoles", le ha dicho.