El rey Juan Carlos, a pesar de que no acostumbra a hablar en público sobre temas de actualidad, dio ayer un claro espaldarazo a José Luis Rodríguez Zapatero en su intento de lograr la paz en Euskadi mediante el diálogo con ETA. En una charla informal con periodistas, el Rey destacó la importancia de que unionistas y republicanos hayan dejado de lado sus diferencias y hayan formado un Gobierno de unidad en Irlanda del Norte. El Monarca resaltó que llegar a este acuerdo ha costado "más de diez años", pero que este tipo de procesos, aunque muy largos, "hay que intentarlos porque si se consiguen, se consiguen".

Juan Carlos hizo estas reflexiones en la sede central de la Guardia Civil. Durante el cóctel con los altos mandos del instituto armado y del Ministerio del Interior --entre ellos el ministro Alfredo Pérez Rubalcaba-- fue abordado por los periodistas, quienes le pidieron permiso para preguntarle sobre asuntos políticos. El Rey aceptó de buen grado, y la primera cuestión fue sobre el tema que más confrontación política genera en España: el proceso de paz. El jefe del Estado contestó que la política antiterrorista le corresponde al Gobierno y que él "estaba por encima".

El rey Juan Carlos destacó la "importancia" de la foto alcanzada el miércoles en Irlanda del Norte, cuando se sentaron en la misma mesa el unionista Ian Paisley y el número dos del Sinn Fein, Martin McGuinness, tras jurar sus cargos en el nuevo Gobierno del Ulster. Tony Blair, invitado de honor en este acto, destacó que en este acuerdo "hay una lección para cualquier lugar en conflicto".

EL PAPEL DEL ´PREMIER´ El Rey destacó la labor llevada a cabo por el líder laborista. No obstante, negó que haya paralelismos entre los proceso de paz de Euskadi y el Ulster. No es la primera vez que el Rey habla del conflicto vasco en charlas informales con la prensa o los invitados a un acto. Pero en los discursos oficiales, desde que ETA decretó el alto el fuego, el Monarca se ha limitado a hacer llamamientos a la unidad de los partidos, y en contadas ocasiones. Así, en la Pascua Militar del pasado enero, pocos días después del atentado en la T-4, subrayó que "unidos acabemos con el terrorismo".

El apoyo real al intento de trabajar por la paz le llega a Zapatero en uno de los peores momentos de la legislatura en lo que al conflicto vasco respecta. Además del atentado de Barajas, la policía ha desarticulado dos comandos etarras. A esto hay que sumar la oposición del PP y sus asociaciones afines de víctimas, así como la impopularidad de las imágenes de Iñaki de Juana Chaos paseando fuera del hospital y de que el fiscal y el abogado del Estado solo hayan recurrido la mitad de las listas de ANV.