Los Reyes visitan hoy Ceuta y sus habitantes esperan con gran ilusión el encuentro. Tras su viaje de mañana a Melilla, cuando está a punto de cumplir 32 años de reinado, el jefe del Estado habrá cumplido su deseo de haber pisado todo el territorio español, representado al menos en todas sus capitales. Algo que quería conseguir, a pesar de las tensiones que un viaje como este iba a originar y que siempre ha aconsejado su demora.

La satisfacción de los ceutís era ayer tan evidente que apenas se interesaron por la reacción marroquí. Muchos no habían nacido cuando los entonces Príncipes estuvieron ahí hace 37 años.

Y aunque la presencia de Juan Carlos trata de subrayar la identidad española de este puerto abierto al estrecho de Gibraltar, la inversión del Estado en Ceuta, que tiene 75.000 habitantes, y reflejada en un nuevo hospital, viviendas de protección y un largo etcétera, indica que para España es un punto estratégico.

Los Reyes llegarán hoy a las 12 del mediodía al centro de la ciudad, la plaza de Africa, para ser recibidos en el palacio de la asamblea ceutí por unas 80 personas representativas de la localidad. Será allí donde Juan Carlos y Sofía escucharán la bienvenida del presidente del Consejo de Gobierno, Juan Jesús Vivas (PP). Tras la entrega al Rey de la llave de oro de la ciudad, el Monarca tomará la palabra.

DISCURSO SIN ARISTAS Según fuentes diplomáticas, no parece que su discurso vaya a incluir ninguna alusión a Marruecos y menos todavía la sombra de cualquier reproche por la intemperancia de Rabat.

Al almuerzo que se servirá a continuación en el Parador Nacional La Muralla están invitadas 300 personas representativas de la sociedad civil ceutí, incluidos miembros de las comunidades religiosas cristiana, musulmana, hebrea e hindú. Tras descubrir una placa en el nuevo parque deportivo Juan Carlos I, los Reyes regresarán en helicóptero a Madrid. No está previsto que pernocten ni en Ceuta ni en Melilla, lo que hubiera complicado el despliegue de seguridad.

Las medidas de seguridad eran ayer tarde evidentes. Los accesos hasta la doble valla fronteriza que rodea el municipio hasta adentrarse en el mar estaban cerrados a cal y canto por la Guardia Civil, cuyos agentes se hacían muy visibles, así como los del Cuerpo Nacional de Policía. Unos setecientos miembros de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado han llegado a Ceuta para participar en los distintos dispositivos. La mayor parte del contingente son agentes especiales de la Guardia Civil, que han sido enviados al perímetro fronterizo que separa Ceuta de Marruecos, de ocho kilómetros de longitud. Varias decenas de guardias se han desplegado también en el paso fronterizo del Tarajal, el único para vehículos y peatones con Marruecos, con medios mecánicos que utilizan en los controles de carreteras. A escasos metros de donde se encuentran los agentes se celebrará hoy una manifestación convocada por organizaciones civiles de la provincia de Tetuán, en protesta por la visita real.

La Fuerzas Armadas seguían sus tareas habituales, pero es Ceuta precisamente uno de los lugares en los que su presencia es más palpable. El segundo tercio Duque de Alba de la Legión tiene aquí su sede, y el cuerpo de Artilleros dispone de la fortaleza desde la que se divisa la ciudad.

Más de 140 periodistas se han acreditado para este acontecimiento. Las calles más céntricas de Ceuta se cortarán al tráfico rodado a partir de las 11.30 horas. La ministra de Administraciones Públicas, Elena Salgado, acompaña a los Reyes como ministra de jornada en este viaje.