El candidato del PSOE a la Presidencia del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, que mañana obtendrá la anuencia del comité federal para la carrera electoral, desvelará en un multitudinario acto las líneas maestras de su programa, en el que algunos socialistas esperan ver un giro a la izquierda. Su antecesor como cartel electoral socialista, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha vaticinado esta misma semana que el discurso de Rubalcaba marcará "un antes y un después". Lo que no se sabe todavía es si Rubalcaba aprovechará ese escenario para anunciar cuándo abandona el Ejecutivo, aunque fuentes del PSOE dan por hecho que mañana no se despejará esa incertidumbre. Con un formato similar al de un mitin, en presencia Zapatero y de otro millar de invitados, entre ellos sus más cercanos, como amigos y familiares, Rubalcaba se estrenará en su nuevo cometido con un discurso "de alto calado político" en el Palacio de Congresos de Madrid, en el que se espera que concrete algunas de las reflexiones que ha ido formulando en las últimas semanas. Se aguarda con expectación su discurso en materias como los bancos, los sueldos de los directivos del sector, las grandes fortunas, posible subida de impuestos o el movimiento 15-M. Y es que, aunque no ha sido demasiado preciso hasta ahora sobre sus propuestas, sí han llamado la atención, por ejemplo, sus consideraciones en torno a la responsabilidad de los bancos en la concesión de hipotecas arriesgadas. A su juicio, las entidades bancarias no pueden querer recuperar el dinero "a coste cero" y "a costa de la gente". Sobre "los bonos extraordinariamente altos" que cobran algunos directivos o altos ejecutivos del sector financiero, Rubalcaba entiende que a la gente le parezcan "un exceso" difícil de justificar y que se indignen. Una de sus primeras propuestas la formuló en Valladolid, en una reunión sectorial con colectivos de educación, donde apostó por establecer una fórmula similar al MIR sanitario para el acceso del profesorado. Rubalcaba anunció en Santiago el pasado fin de semana que el proyecto de presupuestos generales del Estado para 2012 destinará 8.000 millones de euros adicionales a las comunidades autónomas, y apostó por dedicar esa suma al sistema de salud. Se ha mostrado partidario además de una transformación de las diputaciones provinciales, pero no de su supresión, y ha abogado por redefinir su papel para que éste sea prestar servicios a los municipios que por sí mismos no pueden hacerlo. Desde Ferraz advierten, no obstante, de que tampoco hay que esperar demasiadas concreciones mañana, pues el programa electoral comenzará a tomar forma a partir de la conferencia política del 30 de septiembre y del 1 y 2 de octubre. Lo que sí se niega desde el PSOE, en contra de algunas informaciones en ese sentido, es que el candidato vaya a plantear listas electorales abiertas. Rubalcaba será designado mañana oficialmente, después de un periodo de tres meses en el que ninguno de los candidatos que querían disputarle el puesto lograra los avales necesarios. La ministra Carme Chacón renunció a plantearle batalla. Tras cumplir los plazos reglamentarios previstas, el 18 de junio la comisión de garantías electorales proclamó al vicepresidente como candidato del PSOE a la Presidencia del Gobierno, a la espera de la ratificación que mañana le dará el comité federal. Casi desde el primer día Rubalcaba se ha dedicado a visitar las diferentes federaciones, con el objetivo de mantener encuentros a puerta cerrada y "a calzón quitado". En la primera parada de su periplo, Sevilla, ya les dijo a los militantes que quería que dejaran de conocerle por Rubalcaba para pasar a ser llamado Alfredo. Santander, Oviedo, Barcelona, Valladolid, Bilbao o Santiago han sido otros de los lugares donde el candidato ha hecho un alto, mientras desde Ferraz su equipo de campaña ha comenzado a preparar las líneas estrategias.