La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha salido al paso este lunes de las informaciones que aseguran que el PP ofreció contrapartidas al extesorero Luis Bárcenas a cambio de su silencio. "No hubo negociación con Bárcenas y la prueba es que está en la cárcel", ha asegurado la vicepresidenta en unas breves declaraciones en la puerta del Senado, dando por sentado que el PP no ha cedido al chantaje del extesorero. "Eso pone de manifiesto que el Estado de Derecho funciona", ha subrayado.

El día que Bárcenas está declarando en la Audiencia Nacional y pocas horas antes de que el presidente del Gobierno Mariano Rajoy comparezca ante los medios por primera vez desde la difusión los SMS que el presidente del Gobierno intercambió con el extesorero del partido, la vicepresidenta ha reiterado que el Gobierno "en absoluto está preocupado" por lo que Bárcenas pueda decir al juez Ruz respecto al entramado de financiación ilegal del PP y los sobresueldos en dinero negro que presuntamente cobraron los miembros de la cúpula de los populares, que afectan al mismo Rajoy. "El Gobierno sigue con su labor de todos los días prestando la máxima colaboración y respeto a la justicia, como quiere cualquier ciudadano", ha insistido.

Preguntada directamente acerca del intercambio de SMS entre Rajoy y Bárcenas, difundidos por el diario 'El Mundo', cuando ya era público que el extesorero tenía grandes quantitades de dinero ocultas en Suiza, Sáenz de Santamaría ha evitado contestar y se ha retirado.