Iñaki Urdangarin empezó ayer su declaración en el juicio por el caso Nóos . El marido de la infanta Cristina reconoció en la vista oral que la empresa Aizoon, cuya titularidad compartían los exduques de Palma, tenía contratados a trabajadores ficticios. El acusado aseguró que no conocía a algunos de los empleados que figuraban en la plantilla de Aizoon. "Me he dado cuenta en este juicio de que algunos trabajadores no sabían que estaban con nosotros", declaró.

Igual que hizo su exsocio, Diego Torres, el cuñado del Rey inculpó a Miguel Tejeiro, exsecretario de la entidad, en la contratación de estas personas: "Tejeiro nos proponía un número de trabajadores para llegar a los baremos fiscales". A pesar de esto, el exduque negó haber cobrado el dinero de sus nóminas, que afirmó que "se les pagaba a ellos".

Pedro Horrach, el fiscal anticorrupción, fue el encargado de iniciar el interrogatorio. "¿Habla en clave con su esposa?", fue la primera pregunta que Horrach formuló a Urdangarin, en referencia a un correo electrónico entre los exduques de Palma. Poco después de hacerlo, dejó claro cuál era su intención: "La misión de la fiscalía no solo es acusar, sino también oponerse a las acusaciones que no considera oportunas", en alusión a la imputación de la infanta Cristina.

Ana María Tejeiro, esposa de Torres, también apareció en las preguntas del letrado. Urdangarin la alejó de las presuntas irregularidades y le atribuyó "solo algunas labores relacionadas con gestiones personales; no desarrollaba ningún trabajo para Aizoon o el Instituto Nóos".

Urdangarin negó que la oficina de seguimiento del equipo ciclista que patrocinó el Gobierno balear fuera "ningún peaje". "Yo nunca he sido comisionista de nada", aclaró. El expresidente del Ejecutivo balear Jaume Matas aseguró justo lo contrario en su declaración del pasado 11 de febrero, cuando dijo que se le pagaron 300.000 euros al cuñado del Rey para hacer de "conseguidor" del acuerdo.

Sobre el equipo ciclista, el acusado también mencionó el partido de pádel al que se refirió en su día José Luis Pepote Ballester, exdirector general de deportes del Gobierno autonómico de Matas. Según Urdangarin, sirvió para hablar de manera informal del proyecto y en ningún momento pidió a Matas que le asignara la oficina del proyecto para cobrar ese importe.

"NO ES UNA MULTINACIONAL" Preguntado sobre varias facturas, dijo desconocer aspectos relacionados con la contabilidad del Instituto Nóos. Asimismo, aseguró que nunca ha negociado "ningún presupuesto". El fiscal Horrach mostró su sorpresa cuando Urdangarin explicó que no sabía quién desempeñaba esta función en la empresa: "Nóos Consultoría no es una multinacional".

El cuñado del Rey continuará su testificación el próximo miércoles a partir de las 9.15 horas, ya que no hay sesión de este juicio los lunes y el martes es festivo en Baleares. El turno del marido de la infanta llegó después de que su exsocio Diego Torres completara su declaración de cuatro días consecutivos, que duró más de 25 horas, en las que defendió su papel al frente del Instituto Nóos y las demás empresas que formaron la supuesta trama corrupta.

Urdangarin se enfrenta a la pena de prisión más larga de todos los que se sientan en el banquillo: entre 19 y 26 años y medio. Y está acusado de cometer presuntamente un total de 25 delitos (de nueve tipos distintos). Su esposa todavía no ha prestado declaración. Se prevé que la infanta testifique la semana que viene.