Los extremeños deberían de trabajar 288 días para pagar la deuda de la comunidad autónoma, lo que supone el cuarto mayor esfuerzo a nivel nacional. Todos los habitantes de las distintas comunidades tendrían que trabajar más de cien días para pagar la deuda pública de su región y sobrepasan las 300 jornadas los de Castilla-La Mancha, con 307, según la AIReF.