En el laberinto de la crisis y con un recorte salarial en pleno proceso judicial, 50.000 funcionarios y laborales de la Junta de Extremadura pertenecientes al ámbito de la Administración general, la docencia y la Sanidad estaban llamados ayer a las urnas para elegir a un total de 393 representantes. Serán delegados anticrisis , que a partir de ahora deberán representar sus derechos y velar por sus intereses.

Al cierre de esta edición, las mesas de votación para el personal del Sistema Extremeño de Salud aún permanecían abiertas --se mantuvieron abiertas hasta la una de la madrugada-- y el recuento de los votos de los docentes no había finalizado, pero según los primeros datos proporcionados por los sindicatos, en el ámbito de la Administración general, CSI-F habría logrado la victoria al obtener el 35,5% de los votos y 48 de los 135 representantes --62 para el personal laboral y 73 para el personal funcionario-- que los empleados públicos de este sector debían elegir. En segundo lugar habría quedado UGT, con 39 delegados, mientras que CCOO obtiene 30 y SGTEX, 18.

DETALLES Más pormenorizadamente y en el mismo ámbito de la Administración general, en el ámbito del personal funcionario CSI-F obtiene 30 delegados de los 73 a elegir, con una representación del 41,9%, frente a los 16 de UGT, los 16 de CCOO y los 13 de SGTEX.

Sin embargo, en el ámbito del personal laboral, UGT consigue la victoria con 23 delegados, frente a los 18 de CSI-F, los 16 de CCOO y los cinco de SGTEX.

A pesar de que los datos referentes a la participación y aceptación de los comicios sindicales no serán proporcionados hasta hoy por la Junta de Extremadura y las agrupaciones participantes, los sindicatos esperaban ayer "una alta participación, superior al 70%", sobre todo motivada por los recortes salariales y las medidas anticrisis del Gobierno central, que afectan de lleno a los empleados públicos. "Una alta participación dignificará el papel de los representantes de los trabajadores y delegados sindicales e impedirá a los poderes económicos cumplir sus espurios deseos en contra de los trabajadores", manifestó ayer UGT.