El 58 por ciento de las empresas extremeñas paró su actividad por el confinamiento debido a la crisis sanitaria del coronavirus, siendo el sector más afectado el de servicios, y el 2,3% de los negocios cerró definitivamente, frente al 1,9% nacional, según una encuesta realizada tras 50 días de la declaración del estado de alarma.

Se trata del informe “Situación del Emprendimiento en Extremadura ante la crisis del covid-19. Análisis y recomendaciones”, del Observatorio de Emprendimiento de la Red GEM de España, realizado por el Grupo de Investigación EMTURIN en la región, que ha sido presentado este martes en la Facultad de Empresas, Finanzas y Turismo de Cáceres.

Según ha expuesto a los medios el director de GEM Extremadura y del informe, Juan Carlos Díaz, respecto a las empresas abiertas durante el estado de alarma que han sido encuestadas, el 14 por ciento del total de negocios ha trabajado normalmente y el resto por teletrabajo, mayoritariamente empresas grandes y relacionadas con la industria y el sector servicios a otras empresas.

Respecto a la media del país, en Extremadura se ha “teletrabajado” casi 20 puntos porcentuales menos, pues un 27 por ciento operaba de esta forma en la región.

Los sectores más afectados por el cierre fueron el de servicios, sobre todo a consumidores pero también a otras empresas, y el primario en menor medida -el 85 por ciento ha estado trabajando-, mientras que en el sector industrial, “muy escaso” en la región, casi en su totalidad ha podido desarrollar su trabajo durante el estado de alarma.

Además, el 84,6 por ciento de las empresas extremeñas han visto afectada su demanda, siete puntos por encima de la media nacional debido a que, de estas, el 44 por ciento no tenían demanda por haber cerrado su negocio.

El 65 por ciento ha tenido que tomar decisiones excepcionales en cuanto a sus empleados, un 43,5 por ciento ERTES y un 10,6 por ciento despidos.

Respecto a la financiación, un 30 por ciento han visto cómo el estado de alarma les afectaba en cuanto a las líneas de crédito, sobre todo, el 93 por ciento de estas, pequeñas y micro empresas, así como autónomos.

Asimismo, a los empresarios extremeños les preocupa más la alta incertidumbre generada (66,5 por ciento) y la falta de medidas para solucionarla (44,6 por ciento), mientras que en el resto de España preocupa más aspectos relacionados con las ayudas de las administraciones públicas, si llegarán o “quedarán desamparados a los pequeños empresarios”.

“Es necesario recuperar la confianza para reducir la alta incertidumbre que hasta ahora se está produciendo y se están reclamando medidas relacionadas con el asesoramiento jurídico y que las medidas fiscales sean estables, pero sobre todo un gran acuerdo entre los agentes sociales y fuerzas políticas para salir de la crisis, en el que cobre importancia el sector productivo”, ha dicho el director del informe.

En Extremadura, el 86,6 por ciento de los empresarios perciben un futuro negativo en los próximos seis meses, con la mayor preocupación en la supervivencia del negocio y el mantenimiento de sus empleados en un 83,6 por ciento de ellos.

La eliminación o reducción de la cuota de autónomos (70,5 por ciento), de Seguridad Social (63,4), líneas de crédito sin coste a largo plazo (56,7) y la eliminación de trabas burocráticas (64,2) son algunas de las medidas sugeridas por los encuestados.