Se encuentran en una zona son alto riesgo de sufrir incendios, ocurren cada año y algunos con graves consecuencias para su entorno... y a pesar de ello hay 95 localidades extremeñas que carecen de un plan periurbano, como se denomina el plan de prevención de incendios que elaboran los ayuntamientos, un traje a medida , para que cada localidad pueda prevenir y actuar ante las consecuencias fatales del fuego.

Según el registro de la Junta de Extremadura, hay 242 entidades locales (ayuntamientos, pedanías y alquerías) en la zonas conocidas como ZAR (Zonas de Alto Riesgo) y de ellas más de un tercio carecen de este plan preventivo, bien porque no han iniciado ningún trámite para ponerlo en marcha o bien porque han desistido de hacerlo. Entre ellas hay entidades menores, aunque representan una minoría ya que figuran 67 ayuntamientos, principalmente de zonas como Hurdes (18), La Vera-Tiétar (12) e Ibores (13), aunque también hay localidades de la Siberia (8), Montánchez (6) y Gata (7), donde un incendio asoló casi 8.000 hectáreas de terreno y cercó localidades como Acebo (no tiene plan periurbano) y Hoyos (no lo ha presentado pero ha iniciado trámites) y Perales del Puerto (el plan está en trámites).

Precisamente el fuego de Gata del verano pasado ha supuesto un punto de inflexión, según admite la Junta de Extremadura, que aprecia "un repunte importante" del número de ayuntamientos que se han preocupado por poner al día o iniciar sus planes preventivos. Atañe a todas las zonas, independientemente del nivel de riesgo, aunque el grado de cumplimiento (bien lo tienen presentado o desarrollado) es algo mayor en el caso de las zonas donde hay mayor probabilidad de incendio. Allí está en torno al 60% o el 70% . También en estas zonas es en las que más se está apreciando ese repunte y en la que la Administarción está priorizando las actuaciones para poner en marcha el plan preventivo. "Por parte de particulares, no estamos teniendo mayor demanda", señalan desde el departamento de Prevención y Extinción de Incendios, donde tramitan más de 5.000 expedientes de fincas forestales.

PROTECCION El plan periurbano es obligatorio (por ley) en todos los municipios de Extremadura, aunque varía la franja de protección sobre la que hay que intervenir en función del riesgo de incendio en cada caso. En las zonas de alto riesgo, las medidas preventivas afectan a 400 metros y en las zonas que no son de alto riesgo, son de 200 metros; fundamentalmente en los casos en los que hay grandes masas forestales en el entorno del municipio.

La ley establece que el ayuntamiento es quien elabora los planes y cada particular (privado o público) al que afecte es responsable de la ejecución, aunque el ayuntamiento podrá actuar de oficio y ejecutarlo de forma subsidiaria si lo considera.

Fuera del entorno urbano también es obligatorio actuar, aunque no siempre los titulares están sujetos a notificarlo a la Administración regional. En Extremadura hay unos 4 millones de hectáreas forestales, de las que 1,2 millones están planificadas, en torno a un 30% del total. En todo caso, que no esté planificado no quiere decir que no se esté haciendo nada en esos terrenos. De hecho el decreto 260/2014 obliga a los propietarios con fincas de dimensiones por debajo de 200 hectáreas a realizar medidas preventivas generales, aunque no están obligados a presentar un documento, por lo que no es posible controlar si se llevan a cabo.