El consejero de Agricultura y Desarrollo Rural, Juan María Vázquez, anuncia la constitución de una comisión en el Ministerio de Medio Ambiente, Rural y Marino para diseñar el plan de apoyo al tabaco.

Según recoge la agencia Efe, Vázquez, en su intervención en el pleno de la Asamblea, califica de aceptable el resultado final del chequo médico de la Política Agraria Comunitaria (PAC), así como el papel de España en la negociación.

El consejero hace hincapié en la importancia de que esta negociación haya supuesto un reconocimiento a la agricultura como un sector estratégico, "al que hay que seguir apoyando con fondos comunitarios", y que se hayan sentado las bases para "seguir hablando de la PAC a partir de 2013".

Con respecto a los cambios establecidos en la modulación de las ayudas, Juan María Vázquez detalla que las propias condiciones del campo extremeño hacen que las modificaciones aprobadas no vayan a suponer una merma sustancial de la renta de los agricultores de la región.

Sobre el tabaco, el titular de Agricultura de la Junta vuelve a indicar que se ha conseguido una posición intermedia entre los intereses de los tabaqueros extremeños y los planteamientos de la Comisión Europea, además de destacar el "gran logro" que ha permitido incluir el tabaco dentro de la revisión de la PAC.

Vázquez insiste en que las medidas aprobadas "dejan la puerta abierta" a que el cultivo del tabaco se mantenga a partir de 2013, una viabilidad sobre la que se ha mostrado convencido.

En ese sentido, enmarca la comisión que hoy se pone en marcha en el ministerio para diseñar un plan de apoyo al sector, también con ayudas directas, que permita hacer más rentable este cultivo con una reducción de los costes de producción y un logro en el incremento de los precios.

Por su parte, el portavoz del PP, José Antonio Monago, considera un fracaso tanto la reforma de la PAC como todo lo aprobado en relación al tabaco, un argumento que refuerza con las valoraciones negativas realizadas por las distintas organizaciones agrarias y por los sindicatos, que advierten de una importante pérdida de empleo.

Monago especifica que no se necesitan compromisos sino soluciones y en ese sentido ha expuesto distintas medidas para salvar de la ruina al sector, como que el 50 por ciento de las ayudas al Desarrollo Rural recaigan en la renta de los agricultores.

De igual forma, reclama la implicación de la empresa pública Cetarsa en un aumento del precio del tabaco cultivado en la región o el compromiso con las multinacionales manufactureras para que compren tabaco en Extremadura.

Por último, el diputado del PSOE, José Luis Viñuela, aboga porque se mantenga la unidad de todos en defensa de los tabaqueros extremeños por el bien de este sector y de las miles de familias que viven de él en el norte de la región.