Los tradicionales festejos de la Nochevieja, entre ellos las típicas fiestas y cotillones, se desarrollaron en la región sin incidentes de relevancia, sin que haya habido problemas destacados, han informado a Efe la Delegación del Gobierno en Extremadura, la Junta de Extremadura y Cruz Roja. Según fuentes de la Delegación gubernativa, la noche fue "muy tranquila, sin problemas", mientras que el responsable regional de Cruz Roja, Jesús López Santana, dijo que fue "todo normal", circunstancias en las que coincide el Ejecutivo autonómico.

La Consejería de Presidencia había autorizado 17 fiestas de fin de año, 13 de ellas en la provincia de Badajoz y cuatro en la de Cáceres, en virtud de lo establecido en la Orden de 26 de noviembre de 1999.

PERMISO EXTRAORDINARIO Esta norma regula el procedimiento de concesión de autorización con carácter extraordinario para la celebración de espectáculos y actividades recreativas, singulares o excepcionales no reglamentadas. Una de las concentraciones más numerosas fue la de Badajoz, donde alrededor de unas 4.000 personas se dieron cita en la plaza de España a partir de las 23.00 horas para despedir el año 2005 y comenzar el 2006 comiéndose las uvas distribuidas gratis por la Asociación de Empresarios del Casco Antiguo.

El reloj del Ayuntamiento de Badajoz fue la guía para que los pacenses reunidos ante el palacio municipal se comieran las doce uvas para, posteriormente, tras un pequeño espectáculo de fuegos artificiales, dar comienzo la fiesta con la música ofrecida por un disc-jockey, aguantando hasta bien entrada la primera madrugada del año 2006.

En Badajoz capital se habían autorizado cotillones en los establecimientos Salones Venecia; Complejo Hostelero Dard´ys; Salón Guadiana y Palacio Cristal, pertenecientes al Hotel Río; Complejo Alcántara y Gran Café Victoria. Mientras, en Cáceres capital sólo había recibido autorización de Presidencia el Club de Tenis Cabezarrubia.