El AVE portugués --Lisboa-Caya/Badajoz-- ya ha echado a andar. Así lo ha confirmado la Red de Alta Velocidad de Portugal (RAVE), que ha remitido el estudio de impacto ambiental del primer tramo a la Agencia Portuguesa de Medio Ambiente.

Se trata, en concreto, del trazado entre Montemor o Novo y Evora, de 34 kilómetros y con una inversión prevista de 285 millones de euros. Además, entre lo que resta de 2007 y la primera mitad del año que viene se elaborarán los estudios de impacto ambiental de los tres tramos restantes, esto es, entre Lisboa y Montemor, Evora-Elvas y la parte portuguesa del tramo transfronterizo.

En esta línea, la RAVE ha confirmado la aprobación del modelo de negocio que se aplicará en lado portugués y que, entre otras cosas, supondrá la entrada de capital privado y una optimización de recursos que permitirá rebajar la inversión.

Según explica la empresa lusa de alta velocidad, el trazado entre Lisboa y la frontera española será dividido en dos grandes tramos (Lisboa-Poceirao y de ahí hasta Caya), cada uno de los cuales será gestionado por una empresa mixta, es decir, con capital público y privado. Este modelo de gestión permitirá, según la RAVE, un ahorro de 400 millones de euros (un 17%), de forma que la inversión pasará de 2.400 a 2.000 millones de euros.

En cuanto a los plazos, está previsto que todas las licitaciones de los proyectos se produzcan en el segundo semestre del 2008, así como que el AVE una Lisboa con Badajoz en el 2013.