El presidente de Caja de Extremadura, Víctor Bravo, ha defendido el modelo de las cajas de ahorro a través de un nuevo instrumento como es el ejercicio indirecto de la actividad financiera, una formula contemplada en el nuevo modelo regulatorio de estas entidades y por el que han optado la mayor parte de las cajas.
Según informó ayer la entidad financiera en una nota, Bravo defendió ante los miembros de la Asamblea General de Caja Extremadura celebrada el jueves en Plasencia, la gestión llevada a cabo en los últimos meses, primera asamblea tras la decisión de integrarse en Liberbank, el nuevo grupo financiero constituido junto a CajAstur y Caja Cantabria.
En su informe sobre la evolución de las principales magnitudes económicas y situación de los mercados financieros, vaticinó que las perspectivas para el próximo año se caracterizarán por las "políticas de ajustes derivadas de la caída del negocio financiero, así como por un incremento en las necesidades de recapitalización como consecuencia de unas mayores exigencias de capital principal y recursos propios".
Entre los temas abordados, también destacó la aprobación de las directrices básicas del plan de actuación para el año 2012, así como las principales líneas generales de las políticas y estrategias de la Caja para el próximo ejercicio, orientaciones que fueron expuestas por el director general de la entidad, Miguel Angel Barra.
Por último, se informó a los consejeros generales de los resultados obtenidos hasta el tercer trimestre por Liberbank, que han presentado un beneficio neto atribuido de 214 millones de euros.
Este resultado, según Caja Extremadura, ha supuesto reforzar los niveles de capitalización del grupo por la vía de la generación interna de recursos y cumplir con las exigencias de capital principal (core capital) establecidas en el Decreto Ley de Reforzamiento de las entidades financieras sin recurrir a las ayudas públicas contempladas en el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB).
