La Unión Extremadura aconsejó ayer a los productores de tomate presentar los correspondientes partes de daños a Agroseguros en los próximos días pues la persistente lluvia caída va a suponer "una pérdida importante de cosecha" que, en una primera valoración, calcula en "más de 250.000 toneladas, por importe de 18.750.000 euros". Esta organización indicó que durante la semana pasada cayeron más de 100 litros de agua por metro cuadrado en las Vegas del Guadiana y alrededor de 130 en la zona del Alagón y Arrago, en el norte extremeño. "Estas lluvias que han sido beneficiosas para la ganadería están produciendo daños importantes en las plantaciones de tomates", alertó en un comunicado.
La Unión calcula que de las 18.000 hectáreas plantadas "más de 10.000 presentan síntomas de asfixia radicular", que deberán contar con un seguimiento. Concretó que estas plantas van a mostrar "la pérdida de este sistema radicular en el momento del engorde del fruto", por lo que resulta "imprescindible" que los productores presenten los partes de daños a Agroseguros en los próximos días, ya que la norma que regula el seguro "obliga a los damnificados a presentar parte de daños en los días siguientes al hecho". Al mismo tiempo, señaló que las 7.000 hectáreas restantes de cultivo que aún no se han plantado debido igualmente a la lluvia, van a tener "pérdida de cosecha por el retraso de la plantación" y el riesgo que va a suponer tanto el calor en la floración como los propios de las producciones tardías.
