El consejero de Salud y Política Social, Luis Alfonso Hernández Carrón, reconoció ayer que la situación de los servicios sociales de base de la región es "muy complicada" debido a la ley "obsoleta" de 1987, pero afirma que se ha mejorado en el último año y que con la nueva normativa que elabora el Gobierno regional, se avanzará más.

En unas jornadas en las que ha presentado el borrador del anteproyecto de Ley de Servicios Sociales de Extremadura a los 235 profesionales del sector en la región, Carrón ha señalado que un informe de la Asociación de Directivos de Trabajo Social del país sitúa a Extremadura en "una posición débil", con una nota de 4,60 puntos, pero afirma que en los últimos 12 meses ha mejorado la situación con respecto a los 4,20 puntos del año anterior. No obstante, ha añadido que Extremadura tiene una calificación mejor que otras regiones como Andalucía, Asturias, Madrid, Murcia y Galicia y ha recordado que es la única que ha incrementado el gasto en política social.

La nueva ley será un documento "moderno, de tercera generación", cuyo objetivo es dotar de estabilidad presupuestaria a los servicios sociales para garantizar su disfrute. Asimismo, se pretende que haya una mayor colaboración entre las entidades públicas y las asociaciones de voluntariado y oenegés. Carrón ha reconocido que es difícil que el texto pueda estar aprobado antes del próximo verano.