Entre 100 y 150 personas se concentraron ayer ante las puertas de la Delegación del Gobierno en Badajoz, convocados por IU, para protestar por las multas impuestas a un centenar de ciudadanos de Villafranca --por supuestas amenazas a concejales-- y de Montijo --por protestas en un pleno tras la privatización de los servicios municipales--.

No hubo incidentes y los manifestantes corearon gritos como "libertad de expresión", "basta de represión" y "Extremadura es una dictadura". Entre los asistentes estaba Víctor Casco, coordinador regional de IU.

Por otro lado, la Federación de Municipios y Provincias de Extremadura (Fempex) se personará como acusación particular en todo proceso penal que se inicie por la agresión a un alcalde o edil para que sobre el autor "caigan las máximas penas de nuestro ordenamiento jurídico".