Enero es el mes hábil para que los funcionarios cambien de seguro médico. El comienzo del año es en general un buen momento para plantearse si debemos cambiar nuestra compañía. La oferta es muy amplia y el precio no siempre es una referencia. Adeslas, Aresa, Asisa, Caser, DKV, Mapfre, Sanitas o Wintertur son algunas de las compañías más conocidas.
El asegurado debe tener en cuenta que no todas las compañías aseguran a mayores de 64 años, según indica www.elseguromedico.es, página que ha conseguido recientemente el reconocimiento de Web de Interes Sanitario. Además, no todas las compañías tienen buenos cuadros médicos para toda España. Algunas están especializadas en Madrid, o solo en grandes capitales. Puede que los médicos que tengan disponibles se encuentren lejos de donde resida el asegurado. A la hora de ir a Urgencias es muy importante la cercanía del hospital.
También hay que prestar atención a los periodos de carencia, tiempo durante el cual no se pueden utilizar los servicios de la compañía. El periodo de carencia es el tiempo durante el cual no están garantizadas algunas de las coberturas de la póliza de salud. En los seguros médicos, los servicios más comunes con periodos de carencia son la atención al parto (10 meses), o las intervenciones quirúrgicas (6 meses), entre otros, por ejemplo ciertos transplantes. Influye si la asegurada está embarazada o tiene alguna enfermedad. Hay que prestar mucha atención a los periodos de carencia, ya que puede ser que una vez asegurado, no le atiendan su embarazo o dolencia. También hay que informarse de los copagos (coste de cada servicio médico), ya que en algunas compañías para determinados servicios cobran una pequeña cantidad de dinero.
Además si el asegurado viaja mucho, sobre todo fuera de España, debe buscar un seguro medico o de salud que le cubra la asistencia en el extranjero. Atención: es posible que tenga entonces que pagar la asistencia médica y que luego sólo le reembolsen una parte de lo entregado.
Si el asegurado tiene ya alguna patología o enfermedad debe asegurarse de que su seguro médico o de salud se lo va a cubrir, ya que no todos cubren enfermedades psicológicas, diálisis, oncología o trasplantes.
Por supuesto el coste es importante; sobre todo, depende de la edad y la zona de residencia.
