El consumo de energía eléctrica marca récords históricos año tras año en Extremadura. A pesar de que en el 2002 se produjo un ligero retroceso en la demanda, la evolución de ésta en la última década (véase gráfico) muestra un fuerte ritmo de crecimiento, más intenso si cabe que el de la media de las comunidades autónomas. Entre 1996 y el 2002, en sólo seis años, la electricidad consumida por las familias y las empresas de la región se ha duplicado al pasar de 1.994 gigavatios hora (Gwh) a los 4.038 del 2002, según datos de la Junta de Extremadura y Red Eléctrica de España (REE).

Sin duda, los fenómenos metereológicos extremos como la ola de calor que ha azotado a Extremadura en los primeros 15 días de agosto contribuyen a ello, pues se dispara el uso de aparatos de aire acondicionado. Lo mismo sucedió en diciembre del 2001 con el temporal de frío que afectó a toda España.

MAXIMO CONSUMO EN VERANO

Este verano, tanto Iberdrola como Sevillana Endesa han reconocido que las elevadas temperaturas han llevado los niveles de consumo a máximos históricos en Extremadura. Pero independientemente de los picos de demanda puntuales que se dan en invierno y verano, Extremadura viene registrando un ritmo de crecimiento anual muy sólido, provocado por el incremento del número de empresas existentes en la región y por el boom inmobiliario . En el 2002, el parque empresarial se incrementó un 18%, según datos del INE, y se pusieron en el mercado 16.000 nuevas viviendas.

El nivel de electrificación de los hogares también ha aumento últimamente al incorporar las viviendas más aparatos y de mayor consumo. El incremento de la demanda de energía es un indicador claro de desarrollo económico y de la calidad de vida. Pero a pesar de esta evolución alcista del consumo, Extremadura sigue siendo una despensa energética , pues sólo consume una cuarta parte de lo que genera. Los excedentes de energía se evacúan a otras comunidades autónomas o a Portugal a través de los tendidos de alta tensión, propiedad de REE.

La red eléctrica extremeña está compuesta por 1.750 kilómetros de líneas de 400 kilovoltios, 610 kilómetros de 220 kilovoltios, 3.911 de 132, 66 y 45 kilovoltios y 10.000 kilómetros de 20, 15 y 13 kilovoltios. Estos más de 16.000 kilómetros de tendidos son los que pertenecen a las empresas eléctricas pero no incluyen los miles de kilómetros de circuito que pertenecen a particulares.

Los 540.000 clientes --particulares, empresas y Administración-- que hay en Extremadura son abastecidos por un total de 28 distribuidoras de energía, aunque más del 80% del mercado es de Iberdrola y Sevillana. Muchas de estas distribuidoras son locales y sólo abastecen a un municipio. Su actividad se basa en comprarle la energía a una compañía grande y venderla con margen.

En cuanto a la producción, hay un proyecto de la compañía británica International Power para construir una central de ciclo combinado (a base de gas) de 800 megavatios en Alange.