En los libros con poco fundamento se suele decir que el lenguaje corporal tiene un peso en la comunicación muy importante. Algunos de estos libros lo cifran en un 80% y con ello están diciendo que en la comunicación sólo pesan un 20% las palabras que decimos. Yo no me lo creo; pero hoy les voy a dar la razón.

Por una parte, mi vecino de playa no sabe ni una palabra de inglés. Por otra, casi todos los vecinos de playa que tenemos hablan inglés y no saben ni una palabra de castellano. ¿Os podéis creer que la relación entre ellos es excelente? ¿Os podéis creer que los irlandeses sólo me hablan maravillas de mi vecino?. Y no han cruzado lo que se dice ni una sola palabra entre ellos porque no sería posible.

Le he observado este verano. Te mira a los ojos, cada 30 palabras se ríe porque le apetece, siempre sonríe, jamás he visto un gesto agresivo, brazos abiertos y hasta cuando los cruza parece que está abierto a lo que le dices.

Es difícil tener vecinos respetuosos. Que sean cercanos, pero que no lo sean. Que sean amables sin ser pegajosos. De hecho, yo no creo que sea un vecino respetuoso ya que suelo ignorar a los vecinos de playa. Vengo a pasear, bañarme, leer y poco más. No entiendo que se venga a otra cosa. Nuestra playa cada vez tiene más actividades. Motos, castillos hinchables en el mar, masajes y ahora hasta nos venden dulces. En vacaciones. ¿tienes que llenar el tiempo?. Yo no puedo. Por no hacer, ni llamo a mi madre para decirla lo bien que estoy sin hacer nada. Y es que hay muchos seres que en vacaciones siguen haciendo actividades. Compran, montan, llaman, cenan, visitan, escriben mensajes.

Terminemos con mi vecino. Rafa tiene un lenguaje corporal excelente porque tiene un lenguaje verbal excelente. ¿Conoces a alguien que tenga un lenguaje corporal que no coincida con su lenguaje verbal?. Por cierto mi vecino tampoco realiza actividades en verano. ¿Y tú?

Y tú. ¿has analizado tu lenguaje corporal?