La portavoz de la Junta de Extremadura, Isabel Gil Rosiña, aseguró ayer que no compete al Ejecutivo regional «interpretar» la renuncia al cargo de la directora de la Corporación Extremeña de Medios Audiovisuales, Carmen Santos, dada la «autonomía funcional y jurídica» que tiene el ente. Gil Rosiña compareció ayer en la asamblea, a petición de Podemos para conocer los motivos de la puesta a disposición del cargo que hizo Carmen Santos, y que su portavoz ha ligado al contrato de alquiler de un plató con un sobrecoste del 800%. Explicó que en el mismo mes (marzo) que se conocieron esas dudas, se le comunicó a Santos que se iba a realizar una auditoría interna y ha asegurado que su labor «no es ser juez ni fiscal» a la hora de determinar los responsables en la «cadena de mando» de haber adoptado la decisión sobre el contrato.