Diversas entidades ecologistas lamentaron ayer que continúen las rehalas dentro del Parque Nacional de Monfragüe, la última el pasado viernes, según apuntan, por lo que exigen que se depuren responsabilidades. Según estas entidades, un lince tuvo que huir de una acción de control en la modalidad de montería desarrollada en una finca ubicada en el interior del citado parque. Al parecer, y tal como afirman en nota de prensa, se soltaron 16 rehalas, unos 300 perros, con 50 puestos y los cazadores pagaron hasta 600 euros por venadoabatido.

Cabe señalar que la acción contó con la vigilancia de varios agentes de Medio Natural. Según recoge Efe, los colectivos afirman que un lince ibérico con radiotransmisor pasó delante de variospuestos de monterías, con el respeto más absoluto de los cazadores, «pero huyendo de las rehalas».