El embajador de Estados Unidos en España, Alan Solomont, se ha reunido este lunes con el presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara, a quien ha regalado un ejemplar de Los sueños de mi padre, la célebre autobiografía del presidente de Estados Unidos, Barack Obama. Por su parte, Fernández Vara ha obsequiado al representante de Estados Unidos en España con un volumen ilustrado acerca del patrimonio cultural y paisajístico de Extremadura.

Durante el encuentro, celebrado en la sede de la presidencia de la Junta en Mérida, ambos dirigentes hablaron, entre otros asuntos, acerca de las relaciones económicas entre España y Estados Unidos y las inversiones estadounidenses en Extremadura, y también sobre los sistemas de salud existentes en ambos países.

El embajador ha explicado tras la reunión que esta misma tarde aprovechará su presencia en Mérida para ser recibido por el alcalde, Ángel Calle; visitar las instalaciones de la Agrupación de Cooperativas de Regadío de Extremadura (Acorex); y conocer los monumentos y restos arqueológicos romanos.

Mañana martes se dispondrá a visitar las obras de la planta termosolar que la empresa estadounidense Florida Power lleva a cabo en el municipio de Navalvillar de Pela. Se trata de una de las cuatro plantas que la compañía estadounidense prevé instalar en la comunidad extremeña. El propio embajador ha subrayado que se trata de una las mayores inversiones que una compañía de su país lleva a cabo en España.

En general, Alan Solomont ha destacado el valor de los "lazos económicos" entre su país y España, lo cual "es bueno" para ambas economías y en este caso para la extremeña.

Solomont ha señalado que la inversión estadounidense en España se ha incrementado en los últimos tiempos y seguirá creciendo, a la vez que las grandes compañías españolas aumentan su presencia en Estados Unidos, donde España se ha convertido ya en el segundo país cuya inversión crece con mayor rapidez.

En cuanto la publicación en Wikileaks de información acerca de la prisión de Guantánamo, Solomont ha indicado que lo que a él le importa es que su país y España trabajen juntos para afrontar retos de escala mundial como el terrorismo, el calentamiento global o la crisis económica, y que dicho "episodio" no debe ser motivo de preocupación para las relaciones entre ambos países.