España quiere financiar los costes del corredor ferroviario de alta velocidad entre Madrid y la frontera portuguesa en Badajoz con fondos de la UE, principalmente a través de los FEDER y el Fondo de Cohesión, según el informe de los coordinadores de la red transeuropea de transportes de la Comisión Europea.

Según dicho documento, el coste de las obras en este tramo español del corredor Madrid-Lisboa ascendería a 3.773 millones de euros. Este presupuesto hace difícil que la pretensión española pueda cumplirse en un porcentaje elevado, ya que el trazado extremeño cuesta algo más de 2.000 millones, es decir, casi dos tercios del total de fondos europeos que se estima que vendrán a la región entre el 2007 y el 2013.

Otro punto que recoge el informe es que se mantiene el 2010 como fecha de entrada en servicio de este tramo, mientras que la continuidad hasta Lisboa tendría que esperar al 2013 y hasta Oporto hasta el 2015.

La fecha coincide con lo recogido en el Marco Estratégico Nacional de Referencia, donde Bruselas insta a España a garantizar el cumplimiento del 2010 como plazo límite, tal y como ya adelantó EL PERIODICO, ya que considera este eje como prioritario. Ahí también se le indica al Gobierno español que debe dar preferencia a las inversiones en estos proyectos.

En otro punto del documento de los coordinadores se apunta que el inicio de los trabajos debe situarse entre finales de este año y principios del próximo, lo que obligaría a acelerar los procedimientos, ya que ningún tramo está siquiera licitado.

Asimismo, se refleja que la línea planteada inicialmente para velocidades de entre 300 y 350 kilómetros por hora no tiene perspectivas de una ocupación fuerte, por lo que no se excluye que al final --tal y como ya ha decidido el Ministerio de Fomento-- se construya una línea mixta para viajeros y mercancías, más rentable pero donde las velocidades que se alcancen serán menores.