Extremadura ha provisto hoy el envío de 22 ejemplares de buitre negro a Bulgaria, dentro del proyecto de reintroducción de la especie en ese país en el que participa la asociación AMUS, junto a la Junta de Extremadura, y que coordina la Foundation Conservation Vulture (VCF).

El buitre negro es una especie que hasta los años 70 sufrió una importante regresión, sobre todo por el uso ilegal de veneno, pero en el inicio de los 80 comenzó a estabilizarse e incluso a recuperarse.

Extremadura "es la llave en la recuperación de esta ave necrófaga, ya que es una de las regiones con mayores densidades poblacionales", según indica la asociación AMUS.

Diversas medidas han conseguido que esta especie esté asegurada en zonas como Extremadura, "sobre todo por la existencia de una referente cabaña ganadera en extensivo y unas medidas que regulan y ofrecen la posibilidad de abandonar las reses fallecidas en el campo", ha apuntado.

El buitre negro es una de las mayores rapaces del Paleártico, mide casi tres metros de envergadura y la población española es la más importante del mundo.

En Extremadura se dispone de dos colonias de referencia (Parque Nacional de Monfragüe y Sierra de San Pedro), lo que permite donar algunos ejemplares a otras áreas europeas para proyectos de reintroducción o reforzamiento.

Las cifras que se barajan en España es de entorno a las 2.500 parejas reproductoras y en la provincia de Cáceres se ubica el 50% de la población del país.