Extremadura se mantiene como la comunidad autónoma más segura de España, con un índice de criminalidad de 26,6 delitos por cada mil habitantes, mientras que la media nacional se sitúa en 48, según los datos del 2012 que acaba de hacer públicos el Ministerio de Interior y de los que ayer informó el delegado del Gobierno en Extremadura, Germán López Iglesias, acompañado del jefe superior de la Policía Nacional, Miguel Angel García-Izquierdo y del coronel de la Guardia Civil en Extremadura, Luis Haro.

López Iglesias destacó que el balance es "bastante positivo" para la región a pesar de que los datos al final del año no han sido tan buenos como en los tres primeros trimestres del 2012. La tasa de criminalidad ha bajado un 0,1% respecto al año anterior de forma que las infracciones penales están al nivel de hace ocho años. "Somos un ejemplo en materia de seguridad ciudadana", recalcó el delegado, quien resaltó que Cáceres sigue siendo la ciudad más segura de España.

El año pasado se registraron en Extremadura 29.458 delitos y faltas y una de cada dos infracciones penales fueron esclarecidas. La delincuencia violenta sobre las personas se redujo un 3,4%. Sin embargo han aumentado los homicidios o asesinatos consumados, que han pasado de 10 en el 2011 a 11 en el 2012. Pero por otro lado las lesiones han bajado el 14,5%. Los delitos contra la libertad se han reducido un 7,8% y contra la libertad sexual han bajado un 24,7% (las agresiones sexuales un 15% menos, la corrupción de menores o discapacitados un 40% menos y la pornografía de menores un 78,8% menos).

En el apartado de delitos contra el patrimonio los robos con fuerza en vehículos se han reducido un 10,5% mientras que en los domicilios han subido un 35%, pero se debe a que se han modificado los parámetros y suman los cometidos en viviendas habituales y casas de campo. En seguridad colectiva, un 7,5% menos en tráfico de drogas y un 11% menos en seguridad vial. Sí han aumentado los delitos de falsedad documental un 0,4% y un 56% más los de relaciones familiares.

Entre todos, la Policía Nacional alerta del uso de las redes sociales sobre los menores y a la Guardia Civil del incremento de estafas entre personas mayores.