La construcción de la refinería del Grupo Gallardo en Tierra de Barros requerirá una inversión final de al menos 1.500 millones de euros, lo que supone un incremento de 300 millones sobre las cifras que se estaban manejando y de 600 millones sobre las previsiones iniciales.

Fuentes oficiales del grupo empresarial extremeño adelantaron ayer a EL PERIODICO EXTREMADURA que según avanza el proyecto está quedando patente que la inversión necesaria será mucho mayor de lo que se había calculado, algo que, por otra parte, es normal en inversiones de este calado. En esta línea, recuerdan desde la compañía lo ocurrido --aunque a menor escala por las cantidades que se manejan-- con la cementera de Alconera, donde la adaptación ambiental del proyecto elevó de 90 a 120 millones de euros el coste final que tuvo la industria.

CONFIDENCIAL EN INTERNET Por otro lado, un confidencial de internet afirmaba ayer que Alfonso Gallardo mantiene "avanzadas negociaciones" con la petrolera portuguesa Galp para que se incorpore al proyecto de construcción de la refinería. La información aseguraba, además, haber confirmado este extremo "en fuentes de la corporación industrial Grupo Balboa". De esta manera, la empresa lusa ocuparía, como socio industrial, el hueco que dejó Repsol cuando abandonó el proyecto tras negársele la posibilidad de controlar la mayor parte de la sociedad propietaria de la refinería.

"De acuerdo con los expertos consultados, además de que Portugal es un mercado natural al que venderle productos petrolíferos, existe la posibilidad de que Galp y Gallardo estudien la viabilidad de construir un oleoducto hasta la mar portuguesa para exportar productos vía marítima", apuntaba el mencionado confidencial, que añadía también que el empresario extremeño "está hablando con la banca para la financiación de los cerca de mil millones de euros que tiene previsto endeudarse".

Desde el grupo empresarial extremeño se corroboró a EL PERIODICO que se mantienen negociaciones en Portugal, aunque no se quiso especificar ni con quién ni para qué, al tiempo que se ratificaba que continúan los contactos con entidades financieras con el objeto de buscar fondos.