El Gobierno renunció ayer a plantear una denuncia ´Estado contra Estado´ por las consecuencias de la crisis del pepino, pero dejó la puerta abierta a los productores de frutas y verduras a para plantear demandas legales contra las autoridades de Hamburgo. "Nosotros no podemos entrar, es una decisión que corresponde a entidades privadas", señaló ayer el secretario de Estado para la UE, Diego López Garrido, pese a que días antes el Ejecutivo señaló que no descartaba emprender acciones legales contra Alemania.