Dos mil hectáreas de olivo y vid dañadas, más de 350 de ellas arrasadas por completo. Son las consecuencias que una "intensa" tormenta de granizo dejó el viernes por la tarde en los cultivos de Hinojosa del Valle y Ribera del Fresno. Según el presidente de la organización agraria Coag, Juan Moreno, hay más de 2.000 hectáreas con daños y aproximadamente un centenar de agricultores afectados, la mayoría propietarios de pequeñas parcelas que además, carecen de seguro agrario contra el pedrisco. Moreno no se aventuró a valorar económicamente las pérdidas, pero el vicepresidente de la cooperativa Santo Cristo del Arco Toral de Hinojosa, Laureano Rosario, confirmó que como mínimo y solo en el caso de la aceituna, podrían ascender a 150.000 euros, pues se ha perdido la mitad de la cosecha.

Según Rosario, la "tromba" apenas duró media hora, pero el viento y el granizo que dejó, "muy gordo, como garbanzos", fueron suficientes para dañar 2.000 hectáreas de terreno y arrasar por completo 300 de aceituna y 50 de viñedos. "Se ha perdido la mitad de la cosecha", apunta el vicepresidente, que aclara que en la zona ya no se podrá recolectar la aceituna de verdeo, destinada al consumo de mesa. Y lo mismo ocurre con la uva, señala Moreno. "La fuerza del granizo ha hecho que la vid pierda las hojas y eso, en las fechas que estamos, se traduce en un rebrote que puede afectar también a la campaña del año que viene".

Aunque todavía es pronto para dar una cifra económica sobre las pérdidas, Rosario ha calculado que, en el caso de la aceituna y tomando como referencia la campaña del año pasado, se podrían haber perdido en torno a 150.00 euros. Esta cooperativa, de la que forman parte 80 del centenar de afectados, verá este año reducida su producción de 700.000 a 400.000 kilos de aceituna, que en el 2010 cobraron a una media de 75 céntimos.

SIN SEGURO Según explicó Moreno, los afectados son vecinos de los dos pueblos con pequeñas parcelas de tierra, por lo que la mayoría no tiene seguro contra el pedrisco. "Conozco a algún socio que tiene asegurada la cosecha, pero a ninguno que lo haya hecho contra el pedrisco", señala José Quintero, presidente de la cooperativa de Hinojosa. "Por aquí no es normal que caigan estas trombas y parece que cuando no ocurre, la gente se olvida de que puede pasar", apunta Moreno.

Ante esta situación, la secretaria del Vino de UPA-UCE, Catalina García, confirmó ayer a este diario que el próximo martes --ambas localidades están en fiestas-- habrá una reunión de los afectados para analizar la situación con más detenimiento. En una nota, UPA exigió además que sean los propios técnicos de la Consejería de Agricultura la que evalúe los daños ocasionados a los cultivos de vid y olivar.

Esta es la segunda tormenta que en menos de un año, arrasa hectáreas de olivar en la región. En septiembre del año pasado, el pedrisco arrasó el 90% de la producción de aceituna de la zona de Monterrubio de La Serena, donde también se puso de manifiesto que la mayoría de los afectados no tenía seguro.